La empresa da ganancias pero casi el 15% del personal calificado se fue y está en juicio. Mientras tanto, una funcionaria invitó a Elon Musk a traer su empresa satelital a la Argentina.
Trabajadores de la empresa estatal de telecomunicaciones Arsat denunciaron que casi el 15% del personal altamente calificado decidió renunciar a su puesto en la empresa debido a que la compañía tiene una deuda paritaria desde diciembre de 2023. Mientras tanto, desde la Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología del Gobierno nacional publicaron una invitación para que Elon Musk desembarque en la Argentina con una empresa que competiría directament con Arsat.
“Elon Musk, puedes contar con Argentina para avanzar con los proyectos de SpaceX. Nuestro país ahora está abierto al mundo y nuestra visión es construir, basándonos en las ideas de libertad, un futuro enfocado en la innovación tecnológica al servicio del bienestar de la humanidad”, escribieron en X desde la cuenta oficial de la secretaría que conduce Micaela Sánchez Malcolm.
Además, retomaron la invitación con otro comentario: “Argentina cuenta con las ubicaciones necesarias, recursos humanos calificados y una visión estratégica para participar en el desarrollo de proyectos espaciales a gran escala”.
La prioridad Elon Musk
Lo más llamativo, y que contradice el discurso oficial de que hay que privatizar las empresas públicas porque son un gasto para el Estado, es que Arsat es una compañía superavitaria, que da ganancias a través de la venta y exportación de sus servicios.
Así, la invitación a una firma privada -la de Elon Musk– a competir con la propia no tiene ninguna lógica ni siquiera en el mundo de los negocios que preconiza el Gobierno. Tampoco, el proyecto privatizador que anunció Mariano Greco, presidente de Arsat. Y menos aún, la decisión explícita de no generar nuevos negocios para la empresa: desde la asunción de Milei no se inició ningún proyecto.
El problema de los trabajadores de Arsat
Mientras tanto, una buena parte de los recursos humanos calificados que tiene Argentina en la materia se encuentran en juicio con Arsat por una deuda paritaria que mantiene desde diciembre.
“Esto inició en diciembre de 2023, cuando con el cambio de gobierno la gestión saliente tenía que firmar el acuerdo paritario del último trimestre de ese año. Esa firma no llegó a tiempo y, en forma inmediata, la empresa resolvió no aplicar los aumentos. Llevamos diez meses de conflicto”, explicaron los trabajadores.
Aun así, en septiembre, ni siquiera recibieron el aumento que se le aplicó a los trabajadores del Estado, que fue del 2%.
Elon Musk, Arsat, Foetra
Trabajadores de Arsat manifestándose. Mientras tanto, el Gobierno corteja a Elon Musk.
“No solo no cobramos toda esa deuda paritaria, sino que ahora estamos con los sueldos congelados. Esto empezó en septiembre y, por lo que sabemos, va a seguir durante octubre y los próximos meses también”, agregaron.
En un comunicado, los trabajadores de Arsat explicaron que esto supone una caída real de los salarios de un 50% desde diciembre: “Más de 600 familias están cobrando menos de la mitad del sueldo que deberían”.
Lo que reclaman es recuperar la libertad paritaria que les corresponde por el sector al que pertenecen. Aclararon también que el dinero para sus ingresos sale de esas ganancias que la empresa genera exportando y comercializando servicios.
Importancia estratégica y económica
Solamente ocho países del mundo fabrican y operan sus propios satélites. Argentina es uno de ellos.
“Arsat conecta escuelas rurales, pasos fronterizos, centros de salud. Con sus 35 mil kilómetros de fibra óptica llega a pueblos que están absolutamente desconectados: los grandes operadores no cubren estas zonas por una cuestión de rédito económico. Es un modelo de éxito en lo económico y lo social”, argumentaron.
Pero la falta de inversión en salarios de personal calificado no es el único problema. Desde diciembre no hay nuevos proyectos ni inversiones en las diferentes unidades de negocios (Satelital, Fibra Óptica, Datacenter y Televisión Digital Abierta).
“Además, la empresa mantiene abiertos retiros voluntarios, decisión que, ante el conflicto paritario y la falta de horizonte, profundiza una constante pérdida del valioso capital humano de la compañía”, contaron.
Invitación a Elon Musk y posible privatización
La invitación abierta del Gobierno a Elon Musk, dueño de una empresa que compite directamente con Arsat, es tomada con preocupación.
Arsat es una empresa estratégica para garantizar la soberanía en telecomunicaciones que todavía es del Estado argentino. Desde sus instalaciones opera los servicios ofrecidos por los satélites geoestacionarios ARSAT-1, ARSAT-2, SES-14, la Red Federal de Fibra Óptica, el Centro Nacional de Datos y el soporte técnico a los servicios de TDA Argentina.
El Gobierno de Milei ya adelantó que planea privatizar el 49% de la empresa. “La idea es que ingrese capital privado a la compañía”, reconoció el titular de la empresa nacional de telecomunicaciones, Mariano Greco en unos encuentros internacionales de telecomunicaciones que se realizaron a principios de octubre en Buenos Aires.
«En este momento estamos en un proceso de reordenamiento y puesta en valor de los activos, con la idea de que ingrese capital privado a la compañía y la modalidad va a ser salir a la Bolsa con un porcentaje de las acciones Clase B, las Clase A son las que tiene el Estado», señaló el funcionario.